Las tiendas del hogar están cada vez más extendidas y se pueden encontrar en muchos más sitios, como las tiendas de ikea que se están expandiendo a una velocidad asombrosa, en estas tiendas tienes la opción de decorar tu casa por menos dinero de lo que gastarías si comprases lo muebles en una tienda de muebles normal, solo que la calidad de los muebles es notablemente menor que en una tienda de muebles normal, pero la ventaja que tienen es que los muebles los puedes cambiar cada pocos años cuando se le van gastando las telas o simplemente les dejan de gustar a sus propietarios.

Personalmente no he tenido unas buenas experiencias con las cosas que he tenido de ikea, he tenido una lámpara que no me duró ni tan siquiera un año, la tulipa que era de plástico se fundió con el propio calor de la bombilla y ese no fue el único inconveniente que tiene ikea, no soy al primero al que o bien no le vienen todas las piezas dentro de los embalajes de los muebles o bien las piezas vienen dañadas y ¿a quien le reclamas cuando ya estás en tu casa y te faltan piezas para poder terminar de montar algo? ya que a lo mejor ya no puedes ir a la tienda a reclamar porque te queda lejos y no vas a recorrer un trayecto de varias horas para poder reclamar que te faltan piezas o que te ha venido el mueble dañado, además seguro que por mucho que protestes no te van a hacer ni caso.

Al final en muchas ocasiones no te sale tan rentable el viaje como nos habíamos imaginado en un principio, si tienes que volver a reclamar gastas más en gasolina y en peajes que en lo que te han costado todas las compras que habías hecho.

Como siempre, te das cuenta tarde de que lo barato no siempre sale tan barato por muy bonito que te lo muestren, esas cosas siempre tienen truco pero la gente sigue picando sin parar e ikea sigue vendiendo como si no pasase nada.