Yo era de los que siempre había pensado que todos los bancos son iguales, que no importaba demasiado la entidad a la que entregabas tu dinero, así que mi primer criterio para elegir banco era responder a una pregunta muy sencilla: ¿cuál es la oficina que tengo más cerca de casa? Y así estuve durante muchos años.

Pero mientras yo ahorraba tiempo de camino a la oficina, pasaba por alto que gastaba más en otros aspectos, como en el mantenimiento de la cuenta. Y entonces pensé: ¿y si no tengo que pasar por ninguna oficina de banco porque una entidad me ofrecer las mismas opciones por los canales digitales y, de paso, me ahorro dinero en comisiones? Y así apareció ante mí evo banca inteligente.

¿Es el futuro de las entidades financieras? Es una pregunta demasiado compleja pero está claro que el camino de la banca en relación a la atención al cliente lo marca lo digital. Esto fue lo mismo que pensó EVO Banco hace unos meses cuando llevó a cabo un cambio radical en su modelo de negocio. Y como sucede con todos los cambios importantes la firma ha pedido un poco de paciencia mientras consiguen su objetivo que no es otro que convertirse en una referencia dentro de la banca digital en territorio español.

¿Por qué evo banca inteligente? En mi caso, porque a lo largo de estos años mi forma de entender la gestión del dinero ha cambiado mucho. Prefiero una entidad más pequeña que me trate como un cliente de verdad y que me ofrezca los servicios que yo demando. Acostumbrado como estoy al uso de los canales digitales, ya no me resulta imprescindible tener debajo de casa una oficina, como antiguamente. Incluso desde el móvil puedo hacer casi todo lo que necesito, y esta entidad me lo ofrece.

Tampoco sé decir si esto es inteligente o no, pero yo he tomado una decisión y, por el momento, me va bien. Y el hecho de que otros gigantes de la banca estén cambiando también su modelo de negocio hacia lo digital no hace más que darnos la razón.