Hablamos de la leche con calcio para referirnos a aquella a la que se le ha añadido un extra de este mineral, ya que realmente no existe la leche sin calcio. Todas lo contienen de forma natural. Dicho esto, ¿cuándo conviene enriquecer la leche para que tenga una mayor cantidad?

-Durante el crecimiento. Los niños, al crecer, tienen necesidad de aportes extras de calcio ya que sus huesos están en constante formación. Por eso a muchos los médicos les dan aportes extras en polvo. Pero si se les ofrece leche enriquecida se consigue que lo tomen prácticamente sin darse cuenta y sin tener que consumir nada a mayores.

-Durante la menopausia. Las mujeres, durante la menopausia, tienen a perder grandes cantidades de calcio. Esto hace que sus huesos se debiliten y que tengan más dolores y un mayor riesgo de ruptura. Consumir dos vasos de leche enriquecida con calcio les ayuda a cubrir esta necesidad y contribuye a evitar este problema que suele acabar causando osteoporosis si no se le pone remedio.

-En la tercera edad. Cuando envejecemos necesitamos tomar más calcio porque los huesos se vuelven más débiles tanto en hombres como en mujeres. Por eso, esta leche está tan recomendada para personas de más de 65 años, aunque puede comenzar a tomarse antes si se nota que se tiene una carencia en este sentido.

-Cuando, por el motivo que sea, se recomienda consumir más calcio. Puede haber circunstancias personales que hagan que una persona precise de un mayor aporte de calcio y la leche enriquecida puede ayudar a proporcionárselo. Es el caso de algunos deportistas que consumen más y exigen más a su cuerpo por lo que sus requerimientos son también más especiales.

Para el resto de las personas, la leche normal aporta suficiente calcio sin tener que recurrir a la leche con calcio que es innecesaria. No se recomienda tomar leche enriquecida si no hay una verdadera necesidad ya que el exceso de calcio puede causar cálculos en el riñón y otros problemas de salud como la hipertensión al depositarse estos excesos en nuestros órganos.

Si bien es cierto que habría que tomar mucho calcio en exceso para que esto suceda, hay que tener cuidado ya que no pasa como con las vitaminas que, si te pasas en su toma, las eliminas con la orina. Por eso, ante la duda, lo mejor es consultar al médico sobre la conveniencia o no de tomar esta leche.