El mundo de la radio, más vivo que nunca

El mundo de la radio, más vivo que nunca

A principios de los 80, el grupo británico The Buggles saltaba a la fama con su canción “Video Kills the radio star” (El vídeo mató a la estrella de la radio) en la que se hablaba de que los años dorados de la radio fórmula tocaban a su fin gracias a la aparición de los video clips. Una década más tarde, con la aparición de las cadenas de televisión privadas en España, volvieron a resucitar esta idea. Ahora que había canales privados en los que se emitían todo tipo de programas y de magazines de entretenimiento, ¿quién iba a continuar escuchando la radio?

Pero estamos en el año 2020 y la radio continúa más viva que nunca y sigue siendo la fiel compañera de cientos de personas: las que trabajan en sus coches o camiones, las que están en la oficina y quieren algo de música de fondo, las que están en sus casas y escuchan la radio mientras realizan otro tipo de tareas.

La radio se ha mantenido ahí y conserva un público muy fiel, sobre todo porque ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos y ofrecer formatos mucho más interactivos pero que tienen ese espíritu de siempre, con contertulios que respetan, al menos más que en la televisión, los turnos para hablar y presentadores con mucho carisma que conducen programas que pueden durar muchas horas.

Pero para que estos programas funcionen hacen falta profesionales que sepan darle a la radio ese toque de modernidad que precisa sin perder su esencia. Y estos profesionales no solo están delante de los micrófonos, en muchos casos están detrás, como productores y realizadores de estos programas, asegurándose de que toda la parte técnica funcione y de que todo salga como es debido.

Estos profesionales se forman, por ejemplo, en un Grado en comunicacion audiovisual en Madrid que los habilita para llevar a cabo estas funciones. Ellos son los responsables de que el programa de radio tenga un buen ritmo, de que las conexiones sean fluidas y de que todo parezca muy sencillo y casi improvisado cuando lo escucha el oyente. Pero siempre con un gran trabajo profesional detrás.

La radio tiene muy buena salud, le queda mucha vida por delante y por eso, formarse para continuar realizando programas de radio acordes a los nuevos tiempos es una gran salida laboral para muchos jóvenes que buscan una profesión con futuro.

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