Son muchos años ya con problemas con mis vecinos de finca. Ya hace tiempo que no nos hablamos y tratamos de evitarnos en el pueblo. La lista de desencuentros es demasiado grande así que mejor pasarla por alto. Admito que nosotros también tenemos nuestra parte de culpa. De cualquier forma, el último problema me ha hecho pensar en la posibilidad de buscar ayuda profesional de una vez.

Los dos tenemos una amplia finca con terreno colindante. Siempre hemos tenido disputas con las lindes, pero como se suele decir la sangre no ha llegado al río. Por suerte, no somos ninguno de los dos hombres temperamentales, así que intentamos llevarlo como podemos. Pero la última del vecino ha sobrepasado los límites habituales, nunca mejor dicho, y he empezado a buscar abogados en A Coruña.

Mi hija que ha trabajado en entorno jurídicos, aunque no es abogada, me ha recomendado que busque un abogado especializado en lindes y deslindes que tenga experiencia en esta clase de casos para que el proceso sea más rápido y tengamos más posibilidades solucionarlo sin demasiados efectos colaterales. No quiero líos, ni supongo que el vecino tampoco, por lo tanto, lo que hay que hacer es definir de una vez dónde empieza y termina cada finca para que no haya más discrepancias.

Lo cierto es que el vecino ha modificado uno de los muros de su finca entrando en mi terreno, al menos desde mi punto de vista. Aprovechando que yo no iba a pasar por la finca en un tiempo, debió ponerse manos a la obra. O tal vez fue una coincidencia, no lo sé. La cuestión es que cuando llegué ya había terminado la obra.

Ahora espero que en mi búsqueda de abogados en A Coruña especializados en esta clase de conflictos me ayude a solventar el problema. Espero que, con ello, las dos partes tengamos las cosas claras en cuanto a los límites de las parcelas y, al menos, eso no vuelva a ser un problema. Si seguimos evitándonos en el pueblo, eso ya no es cuestión de abogados.